23/2/2012

El coworking NO es para la época de crisis

Por Eduardo Nuñez Lobato

Por Eduardo Nuñez.-Work Plaza-

En la prensa, en blogs, en anuncios, en muchos lugares vemos anunciado “una solución para la crisis – coworking”. Yo me pregunto: ¿Por qué? ¿Solo es una solución en época de crisis? Estoy un poco cansado de una visión tan limitada que no nos hace ningún favor a los diversos centros de coworking en España, en el mundo.

El coworking es una solución muy inteligente. ¿A caso no hay beneficios en el uso de un centro de coworking en épocas de bonanza? Pues los hay y muchos y no es solo una cuestión del coste. El hecho que estemos en una época de crisis solo significa que debemos optimizar mejor los gastos y las inversiones. Pero esto no significa que en el momento que desaparezca la crisis todos los usuarios se trasladarán a centros de negocios o abran sus propios locales. Por ello, hago un llamamiento para dejar las cosas bien claras. El Coworking es una nueva forma de trabajar que convive perfectamente con otras alternativas. Independiente a una crisis, los clientes de los centros de Coworking son más productivos, más satisfecho de su entorno de trabajo, más profesional con la administración financiera, aumentan facturación, etc.

Hace unos 30 años aparecieron los primeros ordenadores personales en las oficinas. Esto tuvo un enorme impacto en los puestos de trabajo en general y en particular en el mobiliario, las instalaciones eléctricas, iluminación y climatización. También cambió las formas de trabajar debido al nuevo tratamiento de la información, de los datos. En estos tiempos, en donde las tecnologías móviles e inalámbricas se imponen en todos los sectores de todas las empresas, sean estas grandes o muy pequeñas, nos esta empujando a otra nueva forma de trabajar. El trabajo está donde estamos nosotros. Estamos siempre comunicados, informados, “enganchados”. Esto hace que realmente no sea imprescindible presenciarse en el puesto de trabajo para ser productivo. Para las distribuciones de las oficinas significa que las horas en que un puesto de trabajo esta inutilizado aumenta considerablemente. Estamos pagando un coste fijo por un espacio infrautilizado. Mejorar el uso de los puestos es una actitud inteligente desde el punto de vista financiero-económico.

Las grandes empresas tienen más problemas de adaptación a estas nuevas formas de trabajar debido a la gestión de los recursos y principalmente por la incapacidad de los mandos intermedios de gestionar orientado hacia los resultados en vez de por presencia. Igualmente, es debido a las normas, regulaciones y políticas estrictas que impiden la movilidad de los empleados. Modificar estas normas es fácil sobre papel pero en la realidad deben intervenir muchos departamentos y se deben disponer de datos fehacientes para poder tomar una decisión acertadas.

Pero los emprendedores, autónomos y micro-empresas pueden zambullirse en estas nuevas formas de trabajar en un solo segundo. No hace falta cambiar normas y políticas de la empresa. Están preparados para ello y nos beneficiamos de este desarrollo o progreso desde el primer momento, básicamente no existe un tiempo de adaptación. Este colectivo tiene una enorme flexibilidad y sin esfuerzo alguno mejora considerablemente su entorno laboral y sobre todo su resultados empresariales. ¿Qué tiene que ver la crisis con esta evolución? Pues eso, debemos tratar la aparición de los centros de Coworking como una evolución de las oficinas que es muy útil para un amplio colectivo.

Para facilitar la movilidad del colectivo de los emprendedores, autónomos y micro-empresas, WorkPlaza ofrece a sus clientes las últimas tecnologías sin necesidad de alguna inversión por parte de estos clientes. Con este servicio, WorkPlaza, facilita muchísimo el arranque empresarial de buenos proyectos y pone a disposición una variedad de servicios tecnológicos con técnicos cualificados para su implantación o para la resolución de cualquier problema.

El Coworking es la forma de trabajar del futuro y las grandes empresas terminarán trabajando de este modo en las siguiente décadas. Esto es el progreso, no la adaptación a una crisis.